Nombre: Reúne dos conceptos fundamentales que, en Oaxaca, adquieren una relevancia singular. Con sus abundantes sierras y grupos montañosos, estas tierras se enmarcan en un entorno natural único y determinante. Cada cerro, cada paraje, cada montaña y cada valle poseen una identidad compartida con sus habitantes. Esta relación, cultivada a lo largo de miles de años, ha entretejido una profunda riqueza cultural que habla de historias, mitos, leyendas, hechizos y conjuros. Así, Cerro Brujo atrapa con su magia —siempre blanca— a todo aquel que lo conoce. Prodiga su energía mística a quien lo prueba y se entrega a sus encantos.